El fitoplancton y el zooplancton presentan determinados requerimientos ecológicos que determinan sus patrones de distribución, y que los organismos responden rápidamente a los cambios ambientales, por lo que el seguimiento de los cambios en la distribución y composición del fitoplancton y zooplancton, así como de los cambios ambientales, pueden permitir una cierta capacidad predictiva para establecer un sistema de monitorización ambiental; es decir, se puede utilizar como un indicador de la condición de salud del ecosistema. Análisis de fitoplancton: Este muestreo se realizó con la ayuda de las botellas oceanográficas, un cable de acero, un peso muerto y un malacate eléctrico. Una vez posicionado en la estación a muestrear y con la ayuda del equipo antes descrito, se baja una botella al fondo del mar y la otra botella se baja a unos cuantos centímetros por debajo de la superficie del mar, se envía un mensajero que cierra las dos botellas. La muestra se guarda en frascos color ámbar de 250 ml y se agrega 1 ml de Lugol para su preservación. Análisis de zooplancton: Este muestreo se realizó con la ayuda de la red, un cable de acero, un peso muerto y un malacate eléctrico. Una vez posicionado en la estación a muestrear y con la ayuda del equipo antes descrito, se baja la red al fondo del mar, se sube despacio para hacer pasar el agua por las paredes de la red y con ello capturar organismos del zooplancton. La muestra se preserva en frascos de 500 ml y se agrega formol al 4% para su preservación. Análisis calidad de agua: Este muestreo se realizó con la ayuda de las botellas oceanográficas, un cable de acero, un peso muerto y un malacate eléctrico. Una vez posicionado en la estación a muestrear y con la ayuda del equipo antes descrito, se baja una botella al fondo del mar y la otra botella se baja a unos cuantos centímetros por debajo de la superficie del mar, se envía un mensajero que cierra las dos botellas. Se toma un galón de agua de mar de cada profundidad y de cada estación. Se preserva en frio.